Platicando con Tarket

Juan Enriquez, tiene un currículo muy rico, pero lo más importante es que tiene claro como los países desarrollados siguen creciendo, mientras en Latinoamérica, España y en gran parte de Estados Unidos ven televisión basura a todas horas como ‘chismes de farándula’, telenovelas típicas deformaciones de cuentos de hadas, talk shows donde el espectáculo es la vulgaridad y no la conversación o la convulsión de comprar el celu o móvil de moda, el MP4, el juego de consola, la ropa o maquillaje, qué cool! Pues, no, porque resultan personas empobrecidas y embrutecidas.

Hasta cuando, especialmente, Latinoamérica, dejará la chingada, la pelotudez, la pendejada y reconocerá que el tema de la ciencia no es de gente superdotada intelectualmente, que no es exclusivo de los nerds, que son los zonzos, todo lo contario, ellos trabajan en compañías o tienen las suyas que venden la tecnología o los productos que los muy ‘listos’ compran sin tener una pálida idea cómo se mueve la realidad del mundo.

La palabra clave es la INVESTIGACIÓN, LA REFLEXIÓN EN LA EDUCACIÓN y si ya echaron a perder generaciones nunca es tarde para usar el sentido común que deberíamos tener, sin excusas, hay bibliotecas públicas, programas de tv de buen contenido y sobre todo los sentidos que tengamos para OBSERVAR base de la ciencia que lleva a la INVESTIGACIÓN.

Sólo por mencionar algo del currículo de Enriquez, es parte del Consejo Consultivo de Genética de la Escuela Médica de la Universidad de Harvard, Director de la compañía Biotechnomy que investiga y busca financiación que permita la evolución genética, fundó el Proyecto de Ciencia de Vida en la Escuela de negocios de la Universidad de Harvard, etc…Antes sirvió como Director Ejecutivo de la Corporación de Desarrollo Urbano de la ciudad de México, Coordinador General de la Política Económica y Jefe del Equipo de la Secretaría de Estado de México y como miembro de la Comisión de Paz que negoció el cese al fuego en la rebelión zapatista en Chiapas.

Hace tres años, ha publicado varios artículos como ‘Transformando Vida, Transformando los negocios en la Vida de la Revolución Científica’. Ha sido reconocido como una de las autoridades líderes mundiales en los impactos económicos y políticos de la vida científica. En el 2000 recibió el segundo lugar del premio Mc Kinsey